De la mano de ‘Bigote’ y Waterman: ¿qué destacar del triunfo en el horno de Sullana?

Con goles de Cecilio Waterman y Sebastián Rodríguez, Alianza Lima superó a Alianza Atlético en el calor de Sullana y ahora apunta al clásico ante la ‘U’. Los íntimos dominaron de principio a fin y continúan invictos en la Liga 1.

Ante la baja de Arregui, Restrepo sorprendió al poner al ‘Bigote’ como ancla, pero su idea le dio resultados: el charrúa fue el encargado de armar las jugadas y tener la claridad para distribuir. Y si bien Alianza pudo adelantarse rápido por un penal, Hernán Barcos falló la ejecución, pero eso no los desconcentró y anotaron en momentos claves: Cecilio Waterman puso el 1-0 a los 34′, tras un error en defensa; y a los 81′, Rodríguez anotó el 2-0 tras asociarse con D’Arrigo. Los íntimos van seis puntos de seis posibles y la próxima fecha será el clásico.

Sigue dulce con el gol

Aunque su fichaje fue cuestionado por algunos hinchas y otros más se sumaron a estas críticas tras verlo en pretemporada, por fallarse algunas jugadas de ataque, Cecilio Waterman viene demostrando el porqué llegó a Alianza Lima. El panameño vino para hacer goles y por ahora está en racha: lleva dos tantos en dos partidos. En Sullana, ‘Aquaman’ fue clave al generar el penal, que fallaría Barcos, y abrir el marcador.

Al panameño le cometieron la infracción dentro del área antes de los 15′, y luego de que el árbitro fuera avisado desde el área del VAR, pitó penal, el que a la postre fallaría Barcos. Sin embargo, la participación del panameño no quedó ahí. Luego de una jugada por izquierda y una pelota que rebotó en Jesús Castillo, ‘Aquaman’ aprovechó el error de la defensa de Sullana que dejó pasar el balón y definió en primera para ser el goleador de Alianza en este arranque de temporada.

La pelota siempre al ‘10′

Una vez que se anunció la alineación de Alianza y se dio a conocer el nombre de Jesús Castillo dentro del ‘11′, la gran mayoría pensó que el ex Cantolao iba a posicionarse como pivote en reemplazo del suspendido Adrián Arregui. Sin embargo, Alejandro Restrepo tenía otros planes en mente, Sebastián Rodríguez fue quien estuvo de ‘ancla’ para sorpresa de muchos.

‘Bigote’, que el partido pasado jugó más adelantado, se posicionó de ‘ancla’ para que todas las pelotas pasen por sus pies. El uruguayo se fue apoderando del equipo y se jugó al ritmo que él quería, recibía libre el balón de los defensas y estuvo más preciso que ante Vallejo. Pero no solo se quedó en la mitad de la cancha: cuando le tocó pisar el área, lo hizo sin problemas. Él comenzó la jugada del 2-0, se asoció con D’Arrigo y este se la devolvió para que el exvolante de Peñarol le de dirección de arco.

Desde la banca

La llegada de Jhamir D’Arrigo y el pago de su cláusula, cerca de 500 mil dólares, generó muchas expectativas en el hincha íntimo. Y aunque Restrepo hasta ahora no lo pone de titular, nunca lo deja a un lado y siempre lo hace entrar, lo mismo que ante Alianza Atlético. El habilidoso extremo entró a los 63′ por Jesús Castillo para jugar como carrilero y no desentonó.

D’Arrigo mostró sus dotes por la banda, haciendo el recorrido y pisando el área. Es así que en la elaboración del 2-0, el exjugador de Melgar se asoció con Sebastián Rodríguez, atacó el espacio y se la devolvió al ‘Bigote’ para acumular su primera asistencia. Según Portal Labs Perú, Jhamir registró además dos entradas efectivas de dos posibles, ganó tres duelos de cuatro, no perdió ni un solo balón y tuvo el 100% de pases (11 de 11).

Sólida defensa

Más allá de que ganaron en su debut ante Vallejo, el hincha se quedó preocupado por la línea de tres, entre el panameño Jiovany Ramos, Aldair Fuentes y el argentino Juan Pablo Freytes. Los refuerzos extranjeros se equivocaron un par de veces en salida (así llegó el 1-0 del ‘Poeta’) y no llegaban con los mejores antecedentes a Sullana; no obstante, de un partido a otro, sus actuaciones fueron de 180°.

Ambos fueron los más sólidos en defensa, ganaron los principales duelos y estuvieron siempre atentos en la marca. Ramos estuvo impecable salvado una pelota que pudo derivar en un mano a mano; lo mismo que Freytes, quien con su buen gesto técnico le da salida limpia al lado izquierdo del campo. Con confianza, tanto el panameño como el argentino dejaron atrás los nervios del primer partido.